Imagina que estás en una tienda de licores, frente a dos botellas. Una es elegante pero sin historia. La otra cuenta en su etiqueta que nació en un pueblo escondido, donde una familia lleva generaciones perfeccionando la receta. ¿Cuál eliges?
Esa segunda botella tiene algo más que sabor: tiene una historia. Y eso, en marketing, se llama storytelling. En este artículo descubrirás por qué el storytelling es clave para vender licores, cómo lo aplican marcas como Johnnie Walker y cómo tú también puedes usarlo para conectar con tus clientes.
¿Qué es el storytelling en marketing?
El storytelling es el arte de contar historias para conectar con una audiencia. En vez de centrarte solo en características (como grados de alcohol o tipo de barrica), usas narrativas que despierten emociones, recuerdos o aspiraciones.
No se trata de inventar cuentos, sino de mostrar el alma de una marca: su origen, valores, luchas, o momentos memorables.
¿Por qué funciona tan bien en la industria de licores?
Porque las bebidas alcohólicas, especialmente las premium, no se compran solo por necesidad. Se compran por experiencia, por estatus, por identidad.
Una buena historia puede hacer que un cliente pague más, se sienta parte de algo exclusivo, y recuerde esa botella mucho tiempo después.
Caso de éxito: Johnnie Walker y su legado narrativo
Johnnie Walker es uno de los mejores ejemplos del poder del storytelling en licores. Su famoso lema “Keep Walking” no habla de whisky. Habla de progreso, superación, evolución. Y eso conecta con millones.
El comercial «The Man Who Walked Around the World» narrado por Robert Carlyle es una verdadera obra maestra del marketing narrativo. Puedes verlo aquí: The Man Who Walked Around the World – YouTube.
A través de sus etiquetas (Red Label, Black Label, Blue Label), Johnnie Walker cuenta una escalera de calidad, aspiración y madurez. Es una historia que se bebe paso a paso.
Cómo aplicar storytelling en tu negocio de licores
1. Conoce la historia detrás de tus productos
Todo licor tiene un origen. ¿Dónde se produce? ¿Quién lo hace? ¿Qué lo hace diferente? Incluso un dato curioso puede ser el comienzo de una buena historia.
2. Usa lenguaje emocional
En vez de decir «es un whisky ahumado», di «evoca noches frías junto al fuego». Crea imágenes mentales, conecta con los sentidos.
3. Incluye al cliente en la historia
Haz que quien compre se sienta parte de la narrativa. «Al elegir este ron, te unes a una tradición centenaria caribeña».
4. Apóyate en el empaque y la presentación
Las etiquetas, botellas y empaques también cuentan historias. Diseños vintage, sellos de origen o mensajes manuscritos refuerzan la autenticidad.
El storytelling también construye fidelidad
Las marcas que cuentan historias no solo venden más. También construyen relaciones. Un cliente que se identifica con una historia, vuelve. Recomienda. Comparte.
Y en el mundo de los licores, donde hay tanta oferta, eso puede marcar la diferencia.
Wikiliquours: historias que conectan con el paladar
En Wikiliquours somos una página web enfocada en las bebidas alcohólicas. Creemos que detrás de cada etiqueta hay una historia que vale la pena contar.
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Recomendación adicional
Si quieres profundizar en cómo aplicar storytelling en marcas de bebidas, te sugerimos leer el artículo «Por qué el storytelling es la nueva ventaja competitiva» de Forbes.